«La Roja se moja»: los colores de Chile tiñen San Petersburgo

Chile

Llegado de Chañaral, en el norte de Chile, Luis recorre con su guitarra y su bandera chilena la avenida central de San Petersburgo con la canción «La Roja se moja», que ha compuesto para animar este domingo a su selección en la final de la Copa Confederaciones ante Alemania.

«Vamos Chile, salgamos, a la cancha a jugar con honor, con la fe de zamorano y la furia del matador. Está resonando el himno, todo Chile se pone de pie, el estadio es un gran estallido, se me está erizando mi piel», canta Luis al micrófono de Efe.

Luis es uno de los cerca de 6.000 chilenos que estarán hoy en el estadio San Petersburgo animando a «la Roja», que según este cantautor amante del fútbol «se va a mojar, porque tiene corazón, quiere ganar la copa y por eso va a salir campeones».

Porque como dice la canción, «si los mineros vencieron, nosotros podemos también, no le tememos a nadie, sea un incendio o un temblor grado diez, y si nos azota un tsunami sabremos vencerlo también».

La plaza del palacio de los zares, la larguísima y majestuosa avenida Nevski, con sus terrazas de verano: todo luce hoy los colores de Chile en medio de una ausencia casi absoluta e inexplicable de aficionados alemanes.

Incluso los banderines que cuelgan en el paseo central por el que se accede al estadio son rojos, azules y blancos, algo que no habrá sentado muy bien a los alemanes que se hayan fijado en la coincidencia (en realidad son también los colores de la bandera rusa).

Javier es Queilén, aunque vive en Berlín, y tenía tanta confianza en que la selección de su país llegaría a este partido que compró las entradas con antelación.

«Creo que es la mejor selección de nuestra historia, como demuestran los títulos que ha conseguido. Ojalá que hoy podamos celebrar uno más, en esta ciudad tan maravillosa», dijo a Efe a pocos metros del museo Hermitage.

Los seguidores chilenos en San Petersburgo esperan que «La Roja» se moje hoy a partir de las 21.00 hora local (18.00 GMT), cuando el balón eche a rodar sobre el césped y arranque los 90 minutos de fútbol más esperados en Chile desde la última Copa América.