Día Mundial de la lucha contra la Desertificación y la Sequía

El 17 de junio, de cada año, se celebra el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, fecha instituida en 1994 por la Asamblea General de Naciones Unidas, que marca a su vez el aniversario de la adopción de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación.

«La degradación de la tierra y la migración» es la frase con que la ONU quiere focalizar en esta jornada para este año 2017, conmemorativa de un tema que castiga a la mitad de los habitantes más pobres del planeta, ya que los efectos de la desertificación los sufren directamente unos 250 millones de personas, mientras que unos 1000 millones se encuentran en zonas de riesgo repartidas en más de cien países. Entre ellos se encuentran las personas más pobres, marginadas y sin representación política.

La degradación de la tierra convierte a las zonas en lugares absolutamente inseguros y para la ONU esa inseguridad puede desestabilizar naciones, y regiones por entero.

Los objetivos de este año 

Para la Organización de la Naciones Unidas (ONU) la celebración de este año analiza la relación entre la degradación de la tierra y la migración. Entre otras, la degradación medioambiental, la inseguridad alimentaria y la pobreza son causas de la migración y de las dificultades para el desarrollo.

En tan solo 15 años, de 2000 a 2015, el número de migrantes en el mundo ha aumentado de 173 a 244 millones.

El objetivo es fortalecer la resiliencia de las comunidades frente a las múltiples dificultades del desarrollo mediante la gestión sostenible de la tierra. Este día nos debe recordar a todos la importancia del suelo en la producción de alimentos y generación de empleo, así como su contribución a la sostenibilidad, estabilidad y seguridad de las zonas afectadas por la desertificación.

La capital de Burkina Faso, Uagadugú, alberga este año la celebración mundial del Día Mundial para Combatir la Desertificación y la Sequía

DesdeLaPlaza.com/La Red/JT