Obama envió una carta secreta al ayatolá iraní, según The Wall Street Journal

El diario, que cita fuentes informadas sobre el contenido de la correspondencia, señala que el mandatario también instó al líder supremo iraní a avanzar para alcanzar un acuerdo en las negociaciones nucleares.

El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, señaló hoy que la política de la Casa Blanca hacia Irán -con el que Estados Unidos no tiene relaciones bilaterales- no ha cambiado y rehusó comentar sobre la misiva.

“No estoy en posición de discutir correspondencia privada entre el presidente y cualquier líder mundial”, dijo en su rueda de prensa diaria en la Casa Blanca, en la que aseguró que “la política que el presidente y su Administración han articulado sobre Irán se mantiene sin cambios”.

Earnest recordó que Estados Unidos ha hablado “en un par de ocasiones” con Irán sobre la campaña global en contra del grupo yihadista EI, en la que participan sesenta países, al margen de las negociaciones internacionales del Grupo 5+1 (China, Rusia, EE.UU., Francia y Reino Unido más Alemania) sobre el plan nuclear iraní.

El portavoz subrayó que, como ha dicho previamente el Gobierno, Estados Unidos no cooperará militarmente con Irán en ese esfuerzo ni compartirá información de inteligencia.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, señaló en otra rueda de prensa que Irán no es un socio fiable y se opuso a que participen en la lucha contra el EI.

“No confío en los iraníes, no creo que tengamos que involucrarles en esto”, dijo Boehner.

Estados Unidos rompió sus relaciones con Irán en abril de 1980, después de que en noviembre de 1979 estudiantes islámicos iniciaran la ocupación de su embajada en , que duró 444 días y donde, con el apoyo del régimen, fueron tomados como rehenes 66 ciudadanos estadounidenses, de los que 52 estuvieron retenidos hasta el final.

Irán está sometido a sanciones internacionales de la ONU y por parte de la UE, Estados Unidos y otros países debido a su programa nuclear, que algunos gobiernos sospechan que tiene fines armamentistas, mientras Teherán asegura que es exclusivamente civil y pacífico. 

Desde la Plaza/EFE/AMH