Puerto Rico y la crisis financiera que EEUU no deja asumir

Puerto Rico quedó este lunes al borde de un default luego de que el gobernador Alejandro García Padilla admitiera que la enorme deuda de 73.000 millones de dólares es impagable.

Lea también: Grecia entra a default al no pagar la deuda al FMI

Sin embargo, distinto a lo que ocurre en Grecia, que también se declaró en default al no poder cumplir con la deuda al Fondo Monetario Internacional, Puerto Rico legalmente no puede declararse en quiebra.

Una de las causas más agudas detrás de la crisis radica en la peculiar condición política de Puerto Rico como estado libre asociado, dependiente de Estados Unidos, pero no enteramente integrada a sus leyes como un estado más.

Estados como la ciudad de Detroit también se han enfrentado a crisis similares y han podido declararse formalmente en quiebra y ser salvadas de algunas de sus obligaciones fiscales. Pero con Puerto Rico, esto no es una opción.

En su condición de estado libre asociado norteamericano, la isla caribeña de 3,5 millones de habitantes no puede declararse en bancarrota, por lo que un impago de deuda podría tomar años en resolverse.

La única opción que se ha asomado hasta la fecha, es la sugerencia de la Casa Blanca, que ha propuesto que Puerto Rico obtenga acceso a la ley de quiebras, pero para eso el Congreso tendría que modificar la legislación.

Lea también: La deuda de Grecia al FMI: un camino de endeudamiento sin sentido

Pero a diferencia de Grecia, que se mantiene en zozobra ante el llamado corralito del fin de semana y el default, Puerto Rico se mantiene en tranquilidad y la población no se ha volcado a extraer sus depósitos de los bancos, ya que los ahorros personales los garantiza la Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC) de Estados Unidos.

DesdeLaPlaza.com/BBC/ElTiempo/NCH