¿Conoces lo chévere que es ser vintage?

El término vintage está siendo muy utilizado últimamente en el ámbito de la moda y la decoración. La palabra se usa para catalogar algo que es antiguo que le pone ese estilo distinto, ese toque chic a tu imagen e incluso a tu hogar.

Cuando entre a formar parte del equipo de trabajo en el portal de noticias para el cual trabajo, lo primero que noté fue la brecha generacional que había entre mis compañeros de trabajo y yo. Brecha que podría convertirse en un obstáculo para encajar en el grupo.

La rutina y el continuo roce con los veinteañeros con los que compartía las 8 horas de trabajo, se convirtieron en un continuo aprendizaje que me demostró que lo que hacía estaba correcto y que era chévere estar allí.

Me costó mucho empezar a escuchar que cuando se dirigían a mí utilizaban la palabra “señora”, cosa que no soportaba mucho, y me preguntaba si eso era lo que proyectaba.

“¡Será que ya me ven como un mueble antiguo, que dentro de la decoración moderna no está mal, pero se distingue por sus peculiares características?”

Recordé claramente la novela transmitida por el canal de televisión Venevisión “¿Vieja yo?” Jamás, aún siento el espíritu joven y a pesar que les llevo unas décadas, acepté el reto de encajar en el grupo al cual que le vi mucho potencial.

Que tengo canas, que tengo edad, que la “señora” debe saber porque tiene mucho más experiencia que nosotros, eran las cosas que escuchaba.

Le fui agarrando el gusto a la cosa y sobre todo cuando entendí que el adjetivo no era para delimitar la brecha sino por aquello del respeto, lo acepté y le di cabida.

Al igual que cuando se escoge un mueble antiguo, al mejor estilo vintage, que va a decorar un espacio en la casa, que a pesar de que no se parece y crees que no encajará con tanta modernidad, el mueble marca la diferencia por ser genuino a pesar de sus años.

Tener 20, tener 40… allí no está la diferencia. La diferencia está en ¡lo chévere que es sentirse vintage!

DesdeLaPlaza.com/ María Isabel Brazón