Vagina estrecha

La petición de muchos hombres es una vagina estrecha. Esta solicitud de los hombres se debe al roce que recibe el pene en las paredes de la vagina. Les permite obtener mayor estimulación y placer.

Hay que recordar que el canal de la vagina está constituido por músculos que podemos dilatar y estrechar a voluntad. De hecho, la vagina está en la capacidad de amoldarse a los diferentes tamaños de pene, con mayor o menor dificultad.

Sin embargo, existen una serie de aspectos que deben considerarse para facilitar el acoplamiento de genitales evitando experiencias no muy satisfactorias.

Para algunas mujeres es de suma importancia el tiempo que tenga el precoito, debe ir acompañado de mucha estimulación, excitación, lubricación y para logra dilatar la vagina antes de intentar de ser penetrada por la pareja.

Siempre les comento lo práctico que es ayudarse con lubricantes a base de agua para complementar los fluidos naturales cuando se tornen escasos, y evitar roces incómodos, irritación o pequeñas lesiones.

Cuidar el ángulo de penetración también favorece a cerrar o dilatar el canal de la vagina. Cada quien tendrá su posición más idónea, si aún no la tiene, intenten encontrar una y comenzar cuando sea necesario con esta posición para ganar seguridad y comodidad durante el encuentro.

Un gran mito es cree que pasar algún tiempo sin tener sexo podría afectar la elasticidad de la vagina, les comento que esto nada tendría que ver, pues la vagina sería como un acordeón: vuelve a su forma natural después de tener relaciones.

Esto sí que puede cambiar su forma

Existen dos situaciones en la vida de la mujer en la que la vagina puede cambiar de forma por un largo periodo de tiempo. La primera, después del parto. Algunos estudios han demostrado que los músculos vaginales pueden tomar hasta 6 meses después de un parto natural para regresar a su forma y tamaño original.

La otra razón por la que la vagina puede cambiar, es cuando envejeces. Conforme la mujer envejece, sus niveles de hormonas disminuyen, lo que significa que las paredes vaginales se adelgazan y se hacen menos elásticas. La buena noticia es que la tonificación de los músculos vaginales puede mejorarse con los famosos ejercicios de Kegel, sin importar la edad de la mujer.

Fortalecer los músculos con los famosos ejercicios de Kegel, el uso de las bolas chinas, sesiones de pilates o yoga; también nos permite crear conciencia sobre la anatomía, fuerza y control que podemos  tener con nuestra vagina.

 

Orientadora en Sexología

Rina Morales

Consulta - Asesoría área de sexología y derechos sexuales y reproductivos. Invitada como especialista en área de sexología y derechos sexuales y reproductivos en diversos medios de comunicación social en Venezuela