¿Cómo superar el fracaso siendo emigrante?

Todo aquel que emigra sabe que siempre llega ese momento en el que eres tú contra el mundo… ¿Te has preguntado en algún momento de tu vida si de verdad ésto es lo que deseas? ¿De pana piensas que este paso es necesario en tu vida para avanzar más?

No todo en la vida es color de rosa, tampoco todo sale como queremos, y muchas veces pasa que emigrar no fue tu mejor decisión, porque todo resulté todo mal… Entonces, ¿cómo superar ese mal momento?

Por muchas razones el extranjero no está hecho para todas las situaciones que se le presentan, no te gusta la comida, el clima es muy adverso, te cuesta mucho aprender idiomas. Recuerda que no todos somos iguales y no a todos nos irá bien en algún momento de nuestras vidas, pero ten en cuenta que no todo está perdido, no significa que eres una persona fracasada.

Déjame decirte que hay gente que nunca en la vida aprende a manejar bicicleta o patinar, no todos tenemos las mismas habilidades, es por eso que no debes afligirte, todo lo contrario, debes recapacitar y hallar las fallas que provocaron que la situación se saliera de control y que al final todo haya sido de la forma que no querías que sucediera.

Eres una persona inteligente y muy valiente al dar un paso tan importante, no siempre se tiene el valor de apostarlo todo por el todo, eso es un gran punto a favor que tienes, pero para la próxima vez, tienes que ser más precavid@, no te dejes llevar por impulsos o por emociones, analízate, localiza tus debilidades y trabaja en ellas para fortalecerlas más.

Errores todos los cometemos, no somos perfectos, y ellos no siempre son malos, son aprendizaje, experiencias que te servirán a futuro, y que te recordaran siempre lo que no debes hacer. Solo depende de tu capacidad de aceptar en que fallaste, corregirlo y seguir avanzando, el éxito de tus metas futuras.

No te detengas, sigue adelante que Roma no se construyó en un día, mucho menos en el primer intento. Ah, casi lo olvidaba, hay cosas que es mejor nunca decirlas, planea y ejecuta de la forma más silenciosa que puedas, la envidia y las malas intenciones de algunas personas tienen el sueño ligero y el ruido que generan tus planes, podrían despertarlos y entonces la torta sería monumental.

Recuerda que está permitido caerse, pero levantarse es obligatorio.