La amenaza del Barcelona es Nolito

Celta y Barcelona disputan el liderato en juego. Un tropiezo de Madrid y Villarreal combinado con un triunfo gallego situaría a los de Berizzo en la parte más alta de la tabla. Aunque no lo tendrán fácil, porque el Barcelona depende de sí mismo para ello.

Los azulgranas llegan a Vigo con un póker de triunfos en las cuatro primeras jornadas de Liga. Su juego no ha sido incontestable, pero sí su eficacia. Luis Enrique se propone un quinto triunfo consecutivo ante su exequipo, que el año pasado se mostró correoso y le costó la primera minicrisis de la temporada, tras derrotar en el Camp Nou (0-1) a un Barça que venía de perder en el Bernabéu.

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El Barcelona se siente en la obligación de regresar de Balaídos con la victoria para no perder comba. El Celta, también. Más allá de la difícil misión de superar a un equipo como el azulgrana, la plantilla céltica ha entendido el partido de hoy como un encuentro para disfrutar y competir. Berizzo quiere quitarle la pelota al campeón de Liga y Europa, tal y como reiteró ayer.

Las buenas sensaciones que dejaron en el primer tiempo disputado en el Ramón Sánchez Pizjuán este pasado domingo confirman que el equipo olívico está preparado para pelear, de igual a igual, con equipos de la zona noble de la tabla clasificatoria.

Será, también, un partido de reencuentros. Vuelve Luis Enrique, tras dejar en el club vigués su impronta hace dos temporadas. Y muchos célticos, además de Nolito, en el que se centrarán los focos, cuentan con pasado azulgrana. Es el caso de Bonano, ayudante de Berizzo, o jugadores como Fontàs, Planas y Sergi Gómez. Menos este último, todos serán hoy titulares.

Con todo el arsenal

Berizzo no dará descansos, no cree en las rotaciones, como ya ha dicho, y tirará de su equipo tipo, con la excepción del sancionado Jonny, suplido por Carles Planas. Cabral y Pablo Hernández están recuperados y el técnico no facilitará la convocatoria hasta esta misma mañana, después de una ligera sesión de estiramiento. Deberá realizar un descarte, al disponer de únicamente 19 futbolistas.

La ambición y la ilusión son patentes en los gallegos. “Tenemos una gran prueba para todos, un gran desafío, equipararnos al mejor equipo del mundo. Vamos a presionar arriba y a discutirle la pelota. La mejor manera que tenemos de defendernos es con el balón. Somos un equipo que, con velocidad y a nuestro mejor nivel, puede hacer daño a cualquier rival”, asegura Berizzo.

El Barcelona, tras las rotaciones del domingo ante el Levante, saldrá con todo su arsenal, consciente de la dificultad que tiene un equipo como el Celta en su casa. Uno de los objetivos principales de los culés es acabar con la portería a cero con Ter Stegen bajo los palos.

DesdeLaPlaza.com/Marca/MB