La incertidumbre de Cristiano

Crisitano Ronaldo en la cancha

Cristiano Ronaldo es la principal precaución en el Real Madrid a nueve días para la final de la Champions. Vaya por delante que, a día de hoy, el portugués está en condiciones de jugar. Y es precisamente esto lo que provoca el debate que hay en Valdebebas y en el Santiago Bernabéu: ¿Debe jugar Cristiano ante el Espanyol?

Cristiano  quiere jugar. Se encuentra bien y quiere rodarse el próximo sábado ante el Espanyol y, de paso, marcar algún gol que le garantice el Pichichi y la Bota de Oro en solitario. El luso se entrenó ayer sobre el césped y comprobó que la pierna izquierda responde perfectamente y que está en condiciones de saltar al Bernabéu el próximo sábado, sobre todo teniendo en cuenta que el Espanyol, en teoría, no le va a exigir demasiado. El luso tiene confianza ciega en su físico y en el hecho de que casi nunca se lesiona.

Pero su opinión no es la misma que las de los servicios médicos, que le recomiendan descanso. Cristiano no está lesionado, pero ha sufrido una importante fatiga muscular en las últimas semanas y los doctores creen que lo más prudente es no forzar la máquina innecesariamente. No jugar ante el Espanyol le garantiza llegar a Lisboa y a esta teoría es a la que se agarran los médicos.

En las oficinas del club blanco también prefieren que Cristiano no juegue ante el Espanyol.

Cristiano se ha visto obligado a dosificarse desde que el pasado 2 de abril, en el partido de ida frente al Borussia, tuviera que ser sustituido poco antes del final del partido porque su rodilla no podía más. Desde entonces, el Madrid ha disputado 10 partidos y el luso se ha perdido cinco.

Además de la rodilla, Ronaldo ha tenido que superar unas molestias musculares en la parte posterior del muslo. Cristiano tuvo que parar tras el partido de ida contra el Borussia. No jugó en Liga frente a la Real con la idea de volver tres días después para el choque de vuelta en Dortmund. En el entrenamiento en Alemania, enseguida comprobó que no estaba recuperado como pensaba.

Cristiano fue baja en los dos siguientes encuentros, frente al Almería y tampoco pudo jugar la final de Copa frente al Barcelona. Tuvo que esperar hasta la ida de las semifinales frente al Bayern. Todo parecía ya que iba sobre ruedas y Cristiano jugó frente a Osasuna, la vuelta frente al equipo alemán y contra el Valencia en Liga.

Sin embargo, contra el Valladolid el luso pide el cambio a los pocos minutos por molestias musculares. Tampoco jugó contra el Celta.

Desde la Plaza/ Marca / AMH