Chávez y el mundo multipolar

La carta de navegación de la Venezuela de la Quinta República: la Constitución Bolivariana, única aprobada en referendo popular, fija el rumbo que el gobierno revolucionario asumió como tarea impostergable en materia internacional.

Desde el hermoso preámbulo escrito por el poeta Gustavo Pereira puede leerse:

“(…) promueva la cooperación pacífica entre las naciones e impulse y consolide la integración latinoamericana de acuerdo con el principio de no intervención y autodeterminación de los pueblos, la garantía universal e indivisible de los derechos humanos, la democratización de la sociedad internacional, el desarme nuclear, el equilibrio ecológico y los bienes jurídicos ambientales como patrimonio común e irrenunciable de la humanidad (…)”.

No era nada inesperado. Hugo Chávez tuvo la virtud de la coherencia. Ejemplo de ello, en agosto de 1998, reunido con los miembros de las Academias Nacionales, en medio de su campaña electoral, Chávez, visualiza claramente el devenir internacional el cual, sin duda, contribuyó a perfilar:

El mundo del siglo XXI, que ya se asoma sobre el horizonte, no será bipolar, tampoco unipolar, gracias a Dios será multipolar; allí tenemos el polo norteamericano, el polo europeo, se reunifica el polo asiático, China se levanta, los tigres del Asia aunque tuvieron un resbalón tienen una gran fuerza para levantarse. Bueno, creo que nosotros tenemos derecho a impulsar con mucha fuerza en esta parte, tenemos obligación además, necesidad además, de impulsar la conformación para el mediano plazo, de un verdadero polo de poder mundial en esta parte del mundo, en esta parte del continente americano. Venezuela está ubicada allí de manera ideal, vista geopolíticamente, para ser una especie de bisagra múltiple entre Mercosur, la Comunidad Andina de Naciones y el Caribe”.

“Nuestro Norte es el Sur”, sería el resumen de la nueva visión latinoamericanista de la política exterior de Venezuela, complementada con la idea de formar un “Mundo Pluripolar” que minimizara la influencia de Estados Unidos en el planeta. Por ello Venezuela estableció relaciones diplomáticas con el mundo entero.

Organismos

Pero la integración no se dará espontáneamente. Así que en lo concreto Chávez caminó la senda integracionista:

Venezuela rompe con la Comunidad ANdina (CAN) cuando este organismo se aproximaba a firmar Tratados de Libre Comercio con Estados Unidos.

  • Inicia la tarea titánica de incluir a Venezuela en el Mercado Común del Sur (Mercosur), que después de una larga historia se concreta el 18 de diciembre de 2013.
  • La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en vigor desde el 11 de marzo de 2011, es otro sueño impulsado por el estadista venezolano.
  • Se crea la Alternativa Bolivariana para los pueblos de nuestra América (Alba) en diciembre de de 2014, luego que los gobiernos progresistas del Sur bloquearan al Área de Libre Comercio para las Américas (Alca) impuesto por Estados Unidos.
  • PetroCaribe nace en 2005 por iniciativa de Venezuela para que los países caribeños compren el petróleo venezolano en condiciones de pago preferencial.
  • Y el más grande sueño de todos: La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) heredero del Grupo de Río, creado en Caracas, en febrero de 2010 sin la intervención de Estados Unidos.
  • El Comandante Hugo Chávez, hizo respetar a Venezuela como nación soberana e independiente y dejó sembrado el debate para un objetico final: conseguir la democratización en la toma de decisiones en los organismos internacionales.

DesdeLaPlaza / Ernesto J. Navarro