El Estado avanza en la lucha contra el contrabando y la mineria ilegal

«La Fuerza Armada está plenamente activada y es irreversible esta lucha que daremos para que el contrabando y la minería pasen a ser malos recuerdos«, así lo informó este sábado el vicepresidente Ejecutivo de la República, Jorge Arreaza, desde el estado Bolívar, en una reunión de la sala situacional del Estado Mayor de Lucha contra el Contrabando y la Minería Ilegal.

El plan especial de lucha contra la minería ilegal que activó el Gobierno Nacional el 27 de agosto en el sur del país ha arrojado el desmantelamiento de 12 campamentos y la detención de 94 personas, así como la incautación de 33 motobombas, 10 balsas, un misil, 4.000 litros de gasolina y 2.860 de gasoil, 850 metros de manguera de alta presión, 670 alfombras que usan para filtrar el material precioso y 3.900 metros de mangueras, así como antenas y decodificadores.

En la actividad que se transmitió Venezolana de Televisión, se mostraron imágenes que revelan el inmenso daño ambiental irreversible causado por esta actividad en las zonas del sur del país, así como parte de los equipos incautados.

Daño irreparable al ecosistema

El contralmirante Alejandro Díaz, comandante de la Quinta Brigada de Infantería Marina Fluvial Capitán José Machado y del Área de Defensa Integral 623, precisó que en este mes se efectuaron siete operaciones importantes en la cuenca hidrográfica del río Caroní.

Resaltó, con fotografías en mano, la magnitud de los males gerenados al ecosistema, incluido un gran hueco que se aprecia en el asentamiento Cartán 2, así como balsas que contienen equipos de extracción de la corteza terrestre en búsqueda de los minerales preciosos, y que la Fuerza Armada neutraliza en el sitio.

También explicó un nuevo método que han descubierto, denominado misil. Este ya no implica el uso de una motobomba ni una planta eléctrica convencional, sino que se hacen de un motor de camión 750 diésel de cuatro cilindros, conectado a un brazo mecánico con cabeza dentada que se sumerge en el lecho del río, lo devasta y absorbe el barro con minerales. Eso es lo que decantan luego en una estructura llamada tame, donde colocan una alfombra que usan para atrapar el oro y los diamantes.

Díaz explicó que parte de los sedimentos que se generan por la minería ilegal llega incluso directamente a las centrales hidroeléctricas.

Desde La Plaza/AVN