El Islam no es enemigo del judaísmo

Situándonos en la actualidad mediática, las transnacionales de la información insisten en presentar el conflicto histórico existente entre Palestina e Israel como una guerra de religiones, en la que se ataca al judaísmo.

Ese tipo de simplificaciones alevosas generan, en quienes consumen esas informaciones, un absoluto desconocimiento cultural e histórico de un conflicto en el que Occidente actúa -no como un observador en un juego de dominó- sino como la parte interesada en generar y mantener la guerra.

Pero… ¿Existe un enfrentamiento Islam – Judaísmo?

Basen Tajeldine(1) estima que, en la necesidad de hacer prevalecer su modelo económico, Estados Unidos apela a la estrategia de inventarse enemigos.

“La presencia de Estados Unidos y su interés de dominio de los territorio musulmanes se debe a que esos países poseen importantes reservas de petróleo y otros minerales los cuales son pretendidos por las grandes corporaciones norteamericanas. Influye mucho, también, la ubicación geopolítica de los países árabes: muy cerca de Europa y de los grandes centros de poder. Esto sirve de justificación para la presencia permanente de las transnacionales en la zona”.

El Islam(2) funcionaría entonces como el pretexto que Estados Unidos necesita para hacer presencia con sus empresas y sus militares.

Opina Basem Tajeldine que en la consecución de los intereses estadounidenses, existe una figura que juega un papel primordial: Israel. “Una figura que se inventa posterior a la segunda guerra mundial, en 1948, cuando se crea esa entidad genocida en el mero corazón de mundo árabe. Es decir en la parte que une a Asia con África, una zona geopolítica muy importante”.

Para la resolución 181 de Naciones Unidas que crea a Israel, explica Tajeldine, se utiliza la falsa bandera del retorno a una supuesta tierra prometida y así quedan encubiertos los verdaderos intereses de Estados Unidos en la región: desestabilizar y dividir al mundo árabe; y evitar el Panarabismo que tuvo su mayor expresión con el gobierno de Gamal Abdel Nasser.

El Panarabismo optaba por demoler el acuerdo Sykes-Picot de 1916(3)con el que Occidente se repartía las tierras árabes. Para ello dividieron esos territorios en los cerca de 20 países que conocemos hoy. Israel fue la gran pieza jugada por Estados Unidos y sus aliados en contra de la unificación árabe.

¿Es un objetivo del Islam enfrentar al judaísmo?

¡Para nada! Responde Basem Tajeldine. “A lo largo de la historia las comunidades judías se han visto refugiadas en territorios árabes. De hecho el Islam nace de una corriente del judaísmo, puede decirse que es la raíz fundadora. La religión musulmana se erige como la continuación, decía el propio Mahoma, de las antiguas religiones del Libro, refiriéndose a la Torá o antiguo testamento”.

A pesar de algunos episodios históricos, siempre ha existido armonía en las tierras árabes.

“Los judíos originarios semitas, no precisamente aquellos judíos que regresaron de Europa y que fundaron la entidad que hoy conocemos como Israel, que no son de origen semita sino europeos conversos o que tomaron la religión judía como suya, son los famosos judíos europeos ashkenazíe que no tienen ninguna raíz semita. Pero el pueblo judío siempre ha convivido con los árabes en santa paz”, explicó.

Nunca ha habido esa diferencia que hoy quieren profundizar entre árabes y judíos, sin embargo, prosigue Basem Tajeldine, “el sionismo(4), que no representa particularmente al judaísmo, es el que ha tratado de desvirtuar esa realidad histórica, esa hermandad, que hubo entre las comunidades originarias semitas judías y los árabes de esa región y han sembrado el conflicto. Han manipulado la historia y han querido mostrar que lo ocurre, particularmente hoy en Palestina, es una guerra de religiones, cuando todos sabemos que no es así”.

Islam y yihadistas

Ubicándose en un contexto más actual, Tajeldine hace hincapié en separar al Islam del yihadismo.

Yihad es un concepto del islam que describe una obligación religiosa de los musulmanes. Ahora bien, el llamado yihadismo tiene su origen en grupos organizados por los servicios de inteligencia de los países que se oponían a los movimientos revolucionarios árabes. Estos grupos de choques, especie de guardias pretorianas fueron apoyados por los reinos montados con apoyo de occidente.

“En la década de los 70, con Al Qaeda a la cabeza, estos grupos enfrentaron a los movimientos revolucionarios. Pero hay que dejar claro que el yihadismo no representa al Islam. El islam encierra una religión, una cultura,un conjunto de doctrinas que marcan las normas sociales de comportamiento y que fueron el legado de Mahoma. Todas esas doctrinas están recogidas en el Corán”.

Desde La Plaza / Ernesto J. Navarro

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(1)Basem Tajeldine es Marxista. Investigador de temas geopolíticos internacionales en el Centro de Saberes Africanos. Especialista en temas del mundo árabe y moderador del programa VOCES CONTRA EL IMPERIO, RadiodelSur y RNV.
(2)El Islam: Religión monoteísta que tuvo su origen en las enseñanzas del profeta Mahoma (570-632) en Arabia, las cuales están recogidas en el Corán; se caracteriza por respetar cinco pilares fundamentales: la profesión de fe, la oración ritual cinco veces al día y el viernes en la mezquita, el ayuno durante el mes del ramadán, la peregrinación a La Meca por lo menos una vez en la vida y la limosna.
(3)Cómo se repartió Oriente Medio (1916-1920) por Henry Laurens http://monde-diplomatique.es/2003/04/laurens.html.
(4)Sionismo:(http://www.telesurtv.net/news/En-detalle-Que-es-el-sionismo-20140709-0020.html).