Luis Aparicio arriba a sus 83 años de vida

Hoy 29 de abril está de cumpleaños la más grande gloria deportiva que haya podido parir el Zulia y toda Venezuela: se trata de Luis Aparicio, único criollo en representar al país en el Salón de la Fama de las Grandes Ligas, que llega hoy a unos dorados 83 años.

Luis Ernesto Aparicio Montiel nació en Maracaibo en 1934, en una familia beisbolera. Su padre, Luis Aparicio Ortega, conocido como “El Grande”, fue uno de los primeros zulianos peloteros reconocidos no sólo a nivel nacional, sino también en el exterior.

Su carrera peloteril se inició el 18 de noviembre de 1953, cuando en el estadio Olímpico de Maracaibo (hoy conocido como Alejandro Borges), en un juego Gavilanes–Pastora, el “Grande” le entregó un guante y un bate a su hijo, quien desde allí iniciaría una carrera llena de reconocimientos.

En nuestro país jugó con Gavilanes, Cervecería Caracas, La Guaira, Zulia y Lara. En total fueron 13 temporadas viendo acción en la pelota local.

Aparicio Montiel debutó en las mayores el 17 de abril de 1956, con los Medias Blancas de Chicago. Jugó también con los Orioles de Baltimore y los Medias Rojas de Boston.

Entre sus más grandes logros está liderar el departamento de bases robadas durante nueve temporadas consecutivas en la Liga Americana.

Fue campeón de Serie Mundial con Baltimore en 1966.

Durante su carrera en Venezuela dejó los siguientes números: jugó 419 juegos, tuvo mil 500 oportunidades al bate, anotó 211 carreras, conectó 370 hits, de ellos 63 dobles, 15 triples y 7 jonrones, impulsó 135 carreras, robó 58 bases y tuvo un averaje de 247.

Mientras que en Estados Unidos dejó registro de 2 mil 677 sencillos, 7 mil 921 remolques, mil 335 anotadas en 10 mil 230 veces al bate con promedio de 262. Ganó nueve guantes de oro y fue Novato del Año de 1956. Todo esto en las 18 campañas en las que estuvo presente en las llamadas Grandes Ligas.

En 1984, Aparicio recibe la noticia que todo pelotero con aspiraciones espera: fue exaltado al Salón de la Fama en Cooperstown, apareciendo en 84.62% de las papeletas.

Los Medias Blancas, equipo con el que pasó la mayoría de su trayectoria profesionalretiraron su número 11 y le construyeron una estatua en el estadio US Cellular Field.

Como manager en Venezuela dirigió a Cardenales de Lara, Águilas del Zulia, Petroleros de Cabimas, Navegantes del Magallanes y Tiburones de La Guaira.

Luis tuvo cinco hijos. Sólo uno (llamado Luis también) fue pelotero profesional, pero nunca se dedicó 100% a la actividad.

Por sus grandes hazañas en los terrenos de pelota, en Venezuela se entrega todos los años desde 2004 el premio Luis Aparicio al mejor criollo de la campaña en Grandes Ligas. El mismo “Luisito” es parte de las ceremonias de premiación.

Tanto él como su antecesor, Alfonso “Chico” Carrasquel, han sido modelos a seguir para figuras como David Concepción, Omar Vizquel, Oswaldo Guillén y prácticamente todos los campocortos venezolanos que han hecho vida tanto en nuestro beisbol como en las mayores.

DesdeLaPlaza.com/Agencias/AMB