El cirujano de la plaza de toros de Huesca, Enrique Crespo, que atendió a Francisco Rivera Ordóñez de su cornada, ha asegurado que el diestro, tras la intervención, «salió estable y consciente», aunque reconoce que estaban pendientes que desde la UCI les informaran, y «afortunadamente no se han encontrado más lesiones».
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Asimismo, esta mañana se ha puesto en contacto con el hospital y le han informado de que «ha pasado una noche estable», por lo que «las noticias son tranquilizadoras pero con prudencia por el tipo de heridas» producidas.
El doctor Crespo dice que «el pronóstico sigue siendo el mismo, muy grave«, ya que las primeras 24 horas y los siguientes 4 ó 5 días, «nos marcarán la pauta de su evolución». Asegura que «las complicaciones que pueden aparecer serían graves», y por ello «está en la UCI estabilizado«.
Explica que Rivera Ordóñez «estuvo calmado y hablándonos«, y ha añadido que antes de la operación les recordó con sus palabras a su padre, ya que les dijo que «todo lo que tengo, lo tengo hacia arriba, hagan lo que tengan que hacer».
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