Lo que Cristo no logró

En el mundo Occidental y Católico se celebran las Pascuas, el periodo donde se conmemora la crucifixión y resurrección de Cristo. Pero Jesús quiso realizar dos cambios que no logró. Cambiar la ley del Talión y sacarle poder a los cambistas que pululaban en el templo.

Ojo por ojo diente por diente. Así reza la ley del Talión, Jesús frente a los discípulos dijo: “Oísteis que fue dicho á los antiguos: Ojo por ojo y diente por diente. Mas yo os digo: no resistáis al mal; antes a cualquiera que te hiriere en tu mejilla diestra, vuélvele también la otra; y al que quisiere ponerte a pleito y tomarte tu ropa, déjale también la capa; y á cualquiera que te cargare por una milla, ve con él dos. Al que te pidiere, dale; y al que quisiere tomar de ti prestado, no se lo rehúses”. Lo que quería decir Cristo era cortar con la cadena de odio. Cortar con las cadenas de venganzas que suele contener la Ley de Talión. ¿Lo logró? Cuando vemos que se lincha a una persona por robar un celular. Cuando vemos que los gobiernos tiran misiles porque responden a una bomba. ¿Realmente podemos pensar que la ley del Talión fue cambiada?

Cuando se narra que Cristo echó a los mercaderes del templo, no debemos pensar que echo a vendedores de telas o mercaderías. Los que había eran animales para sacrificio y cambistas que vendían las monedas para la ofrenda, sólo se permitían hacer ofrendas con las monedas autorizadas por los Fariseos. Según Marcos 11:15-18 “15 Llegaron a Jerusalén; y entrando Jesús en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban en el templo; volcó las mesas de los que cambiaban el dinero y los asientos de los que vendían las palomas, 16 y no permitía que nadie transportara objeto alguno a través del templo. 17 Y les enseñaba, diciendo[a]: “¿No está escrito: ‘MI CASA SERÁ LLAMADA CASA DE ORACIÓN PARA TODAS LAS NACIONES’? Pero ustedes la han hecho CUEVA DE LADRONES.” 18 Los principales sacerdotes y los escribas oyeron esto y buscaban cómo destruir a Jesús, pero Le tenían miedo, pues toda la multitud estaba admirada de Su enseñanza.” Jesús los echó ese día, seguramente volvieron al siguiente y no sólo no se fueron, sino que crecieron, primero fueron bancas pequeñas, después Bancos, ahora grandes corporaciones bancarias, que no sólo manejan las monedas, también el mundo.

¿Cómo sería la vida, si Cristo no hubiera fracasado con la Ley del Talión y los cambistas?