Decisiones al borde de la cornisa

El Estado venezolano en necesidad de afrontar la situación de la principal planta generadora de energía eléctrica en el país, como lo es la hidroeléctrica “El Guri”, que genera el 65% de la energía eléctrica que se consume en el país, se encuentra en niveles nunca vistos, colocando al país en alerta máxima.

Poseer un margen reducido de acción, la sequía que atraviesa el país ocasionado por el efecto “El Niño”, seguir mencionándolo como “Fenómeno” es extraño ,pero es un evento que ha estado ocurriendo con frecuencia en los últimos años, ha llevado al ejecutivo nacional a tomar un conjunto de medidas, tales como: reducción de la jornada laboral, viernes no laboral; Ahora se suman los miércoles y jueves no laborales, para las instituciones públicas.

Sin duda alguna, medidas fuertes de asumir, medidas complejas para procesar y sobretodo, medidas que generan incertidumbre a los ciudadanos.

Entre las decisiones ejecutadas y la sequía ocasionada por “El Niño”, dejan al país en la cornisa, poco margen para accionar y asumir su impacto negativo en el aparato productivo nacional, no es descabellado.

El clima es un conjunto de variables inmenso, donde predecir es complicado, pero no imposible. La única manera para realizar un pronóstico es mediante modelos estadísticos y probabilísticos, manejar fuentes tanto nacionales como internacionales y sobretodo, el histórico que almacena el comportamiento del Sistema Eléctrico Nacional en años anteriores.

¿Se realizó el pronóstico del año 2016, estaba prevista la situación que enfrenta el Sistema Eléctrico Nacional, negligencia o sorpresa? Responder cualquiera sería un irrespeto ante el lector y los responsables que dirigen estas instituciones, pero la pregunta se genera ante la incertidumbre y la poca información técnica que se conoce y se publica de parte de los instituciones oficiales y competentes en el área.

¿Existen alternativas para sobrepasar la situación energética actual?

Sin duda alguna, existen múltiples alternativas, como establecer políticas y mecanismos que permitan apoyar a los grandes consumidores a tener, manejar y gestionar sus plantas de generación y en caso de poseer algún excedente, puedan almacenar dicha energía en bancos de baterías o puedan inyectarla al Sistema Eléctrico Nacional.

Establecer el uso de paneles solares en zonas residenciales, mediante la creación de un plan piloto en las enormes edificaciones de la Gran Misión Vivienda Venezuela, donde estas posean la capacidad de tener un sistema paralelo mediante este tipo de tecnologías y luego, masificarla en todo el territorio nacional.

Sin duda alguna, una de las menos populares, pero así como se realizó un aumento a la gasolina en el país, que sigue estando por debajo de su precio de venta internacional, realizar lo mismo con servicios como el agua y la energía eléctrica no es alocado. Aprovechar las bandas de consumo que se establecieron bajo la campaña “Soy consciente y consumo eficiente” del Ministerio de Energía Eléctrica, así, cualquier abonado que este en la banda verde pueda gozar del subsidio y aquel que se sobrepase, pues establecer una tarifa diferente y más ajustada a los costos internacionales.

Ahora, la cuestión reside en el margen de acción, estrecho y sin posibilidad de errar, por ello se camina en la cornisa y aseverar que estas puedan impactar un cambio importante en la situación actual, es difícil.

Un mundo mejor, palabras que hacen soñar, pero, ¿realmente estarán todos los seres humanos dispuestos a realizarlo? Pues un horizonte tan hermoso genera optimismo, pero el tiempo y los intereses particulares se sobreponen ante semejante idea.

¿Miércoles, jueves y viernes de teletrabajo?

No todos los trabajadores tienen roles que les permitan trabajar a distancia, pero si existe un subconjunto que son candidatos para esta modalidad laboral, relativamente nueva. Será posible que aquellos funcionarios públicos que son afectados por las medidas anunciadas ayer, estarán en sus hogares sin consumir energía eléctrica? No hay un modelo probabilístico y tampoco hipotético/deductivo que permita afirmar o negar con datos duros semejante situación, pero es irregular que no lo haga.

Partir de la idea que aquellos funcionarios públicos afectados, que estarán en sus hogares, consumiendo energía eléctrica, podrán trabajar desde sus hogares, bajo la premisa de laborar para cumplir sus asignaciones y no un horario laboral, permite inmediatamente que las instituciones públicas no se vean afectadas por su ausencia.

Al mismo tiempo, aquellos funcionarios públicos no afectados, podrán trabajar bajo el esquema de cumplir sus asignaciones y objetivos, no cumplir un horario laboral, es decir, para que estar 6 horas en una oficina cuando en 2 horas culminaste todas tus asignaciones. Ese espacio solo esta dedicado para el consumo de recursos innecesarios.

Información relacionada a este modelo laboral es reducida en nuestra región, pero en el portal de la Consumer Technology Association existen múltiples reportes de indicadores, pero dos han llamado nuestra atención, donde se relaciona el impacto del teletrabajo y el comercio electrónico en el consumo y disminución de energía eléctrica, donde indican que aquellas instituciones que ofrecen la modalidad de teletrabajo parcial ahorra hasta 6.5 kWh diarios y en teletrabajo completo hasta 10.7 kWh diarios, este reporte es con data del 2013 y formalizado en el 2014 por el Fraunhofer USA Center for Sustainable Energy Systems.

Véase: The Energy and Greenhouse Gas Emissions Impacts of Telecommuting and e-Commerce (http://goo.gl/h6OBZ0)

Además, esta misma institución realizó un estudio sobre el consumo de los dispositivos electrónicos en el hogar, arrojando resultados de consumo energético como: PC/Desktop 186 kWh/año, Internet Access Devices 62 kWh/año, Computer Monitor 58 kWh/año, Tablet y Smartphones 10,6 kWh/año.

Véase: Energy Consumption of Consumer Electronics in US Homes in 2013 (http://goo.gl/tftG16)

La situación actual debe plantear y reimpulsar el e-Government, aprovecharla para establecer, mejorar y crecer en Tecnologías de Información, permitiéndole a los ciudadanos realizar sus tramites de manera simple, transparente y no invasiva.

En la TecnoPlaza se ha planteado en varios artículos la necesidad de renovar las relaciones laborales y los colores, formas y texturas de cómo se contempla el trabajo digno y liberador. Desde una visión humana, siempre partiendo de la premisa que la tecnología debe ser humana y no, para generar humanos tecnológicos.

DesdeLaPlaza.com/José Manuel España Figueroa.

Twitter: @YoSoyChiqui / @droidstarVE