Un 26 de diciembre la historia del cine de terror cambió para siempre

El 26 de diciembre de 1973 se estrenó una de las películas más aterradoras de la historia: “El exorcista”. Dirigida por William Friedkin y protagonizada por Linda Blair, la película fue un gran éxito de taquilla.Fue nominada a 10 premios de la Academia, incluyendo Mejor director y Mejor Película.

Basado en una novela de William Peter Blatty, publicada en 1971, el film narra la historia de Regan (Linda Blair), una niña de 12 años de edad que empieza tener un comportamiento extraño. Su madre (Ellen Burstyn), preocupada, se pone en contacto con un sacerdote, y este le recomienza exorcizarla. Dos sacerdotes, interpretados por Max Von Sydow y Jason Miller, acuden a la casa de Regan para realizar el exorcismo.

La película tuvo varias secuelas: “El Exorcista II: El Hereje” (1977); “El exorcista III” (1990), escrita y dirigida por William Peter Blatty, quien ganó el Oscar a Mejor Guión; “El exorcista: El comienzo” (2004), dirigida por Renny Harlin; y la precuela “Dominio: Precuela del exorcista” (2005), dirigida por Paul Schrader.

Leer más: ¿En qué se diferenciará el Batman de Ben Affleck del de Christian Bale?  

La película lanzó a Linda Blair al estrellato, quien había comenzado su carrera actuando en comerciales, y le valió una nominación a Mejor Actriz de Reparto. A su director, William Friedkin, también se lo conoce por la premiada película “The French Connection” (1971).

En la película, las grabaciones fueron extremas y los sucesos fuero casi reales, aquí algunos detalles:

El rodaje fue una auténtica prueba para varios de los actores, por los métodos usados por William Friedkin para lograr interpretaciones más convincentes.

Los decorados de la casa de los MacNeil estaban montados dentro de una cámara frigorífica en funcionamiento para que el vaho de la respiración fuera real. 

También, Friedkin hacía explotar petardos para que los actores se sobresaltaran y estuvieran tensos. En otra escena el director le colocó un arnés a Ellen Burstyn para que pareciera de verdad que una fuerza irresistible tiraba de ella (arnés que le lesionó la espalda), no le dijo a Jason Miller que recibiría en la cara un chorro de puré de guisantes que simulaba ser vómito (de modo que su reacción de disgusto es real).

En la escena en la que un sollozante sacerdote (que era sacerdote en la vida real) absuelve al padre Karras, el director le abofeteó para que su llanto fuera más realista. Linda Blair algunas veces tambien fue sujetada fuerte del brazo para poder así mismo interpretar bien a su personaje.

En el estreno, numerosos espectadores sufrieron ataques de nervios y los propietarios de las salas de exhibición decidieron, como reclamo publicitario, apostar en las puertas ambulancias con camillas y enfermeros para atender a los eventuales espectadores desmayados.

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=oK2s2pQs9ko]

DesdeLaPlaza.com/TuHistory.com/CJO