Mujeres y hombres odiamos el acné y nuestra primera reacción al verlo en nuestro rostro es eliminarlo con los dedos, pero antes de que lo hagas, debes saber que existen diferentes tipos de granos y es recomendable que detectes cuál es para que tu piel no quede expuesta a infecciones.
Aunque los tratamientos no hacen que desaparezcan instantáneamente, son el mejor recurso para evitar un problema cutáneo mayor. A continuación te mencionaremos seis tipos de granos que no debes reventar:
Barros
Estos contienen infinidad de bacterias acumuladas en las ‘grasa’, que si se rompe, podrían infectar los poros alrededor del grano, haciendo que te salgan más y más e incluso dejar cicatrices.
Vello encarnado
Hay vellos que quedan atrapados bajo la piel y se piensa que lo mejor es ‘abrir’ con las pinzas para depilar y luego extraerlo. Es lo peor que puedes hacer, ya que no sólo genera inflamación e irritación sino infecciones. Mejor aplica un poco de hidrocortizona que desinflamará la zona y haz vaporizaciones para que tus poros se abran y el vello salga naturalmente.
Herpes labial
Al igual que los barros, tratar de exprimirlos hará que la infección se propague y aparezcan más. No uses limón para ‘secarlos’ pues sólo dañarás tu piel debido al ácido cítrico. Lo mejor es emplear los medicamentos de libre venta para tratarlos. Si el herpes se debe a una ETS, lo mejor es consultar a un médico para su tratamiento adecuado.
Milia
Los ‘puntos de leche’ no generan ningún tipo de síntoma y no son peligrosos. Tratar de exprimirlos sólo genera irritación y sangrado.
Puntos negros
Los puntos negros son poros saturados de ‘grasita’ natural de tu rostro que, con la suciedad y las impurezas del diario, se tornan de un color oscuro. Incluso, también son propensos a convertirse en acné si no los tratas a tiempo. Haz vaporizaciones con té de manzanilla que abrirán tus poros y con ayuda de una toallita húmeda retíralos sin exprimir o forzar su salida.
Acné cístico
Son aquellos barros que se inflaman bajo tu piel y provocan un pequeño bulto enrojecido. No intentes abrir tu piel con pinzas u otro artículo punzocortante, pues el problema esta bajo la capa superficial de tu piel. Si son muy grandes e incómodos, ve con un dermatólogo quien te dará el tratamiento adecuado.
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