Manual para entender a un venezolano (I)

‘Echar’ para representar que ‘hacemos’.

Los venezolanos tenemos una manera muy peculiar de hablar, utilizamos una serie de palabras muy nuestras, conocidas como venezolanismos, muchas vienen de vocablos en otros idiomas que fueron adaptadas a la jerga popular.

El venezolano para referirse que va ‘hacer algo’, adopta la palabra ‘echar’, que por lo general  la acompaña con otra palabra y juntas logran determinar la acción. 

Y es que para hablar con una persona nacida en la tierra del arpa, cuatro y maraca, se necesita de una herramienta: Manual para entender a un venezolano.

Veamos algunos ejemplos:

Echarse los palos:

Se refiere a beber licor. Al abolirse la esclavitud, los hacendados se negaron a pagarle a sus antiguos sirvientes con monedas de plata. Por lo que hacían tablillas con el sello de la hacienda para que pudieran ser canjeadas en las pulperías y bodegas por víveres. Muchos preferían comprar licor por lo que pedían “un palito de ron”, “un palo de miche”, etc. Al tener que contar en que habían despilfarrado las tablillas o palitos decían “me eché los palos”.

Echarle pichón:

Significa hacer un esfuerzo para lograr algo. En los antiguos pueblos y ciudades venezolanas, el agua se obtenía de bombas o fuentes públicas que había que utilizar con esfuerzo físico. Estas bombas tenían un letrero que decía “Push on”, para indicar que había que empujar la palanca para lograr extraer el agua. Al venezolanizarse quedó la expresión “Echarle pichón” para señalar a alguien que tenía que sacar el agua haciendo fuerza en la palanca.

Echar un polvo:

En el siglo XIX y comienzos del siglo XX se popularizó el uso del rapé, (polvo de tabaco inhalado). Como cortesía los hombres se lo ofrecían a las damas: ¿Quiere echar un polvo? Muchas veces los mismos tenían urgencia de inhalarlos por el síndrome de abstinencia y se ausentaban de la reunión social para hacerlo en solitario ya que era de mala educación hacerlo en público. Sin embargo no siempre era para esto sino para tener un encuentro sexual furtivo con una damisela.

Echar Carro:

Significa holgazanear. Está echando carro, es decir que alguien está sin hacer nada.

Echar un Camarón:

En las excavaciones petroleras, los capataces gringos de vez en cuando querían echar una siesta. Pero para no ser vistos por los obreros venezolanos se excusaban diciendo “I come around” (Ya vuelvo). Esta frase al venezolanizarse quedó como ‘camarón’ para definir el sueñito que se echa en medio de una jornada.

Echar los Perros:

Es la actividad de “cortejar” a las damas. Viene del término taurino de “echarle los perros” al toro para cansarlo y ayudar al torero en su faena.

Indiscutiblemente, por esta razón, vayamos a donde vayamos, debemos decir «se habla venezolano».

Hasta una próxima entrega…

DesdeLaPlaza.com/Agencias/Rubén Scorche