Qué tan difícil – o fácil- sería llevar a cabo un atentado terrorista durante un evento deportivo. La última novela del escritor catalán Jordi Calvet, “La espada de Alá” plantea un ataque en el Camp Nou durante un Real Madrid-Barcelona, el clásico del fútbol español.
Calvet sitúa el momento clave de la obra en el partido de vuelta de la Supercopa de España
En la novela, un yihadista de origen tailandes, aunque de padre catalán, es el autor del atentado, que incluye disparos con armas de fuego en contra de los jugadores del Real Madrid mientras celebran un gol y la colocación de un carro-bomba en un estacionamiento cercano al Cam Nou.
Jordi Calvet, aficionado al Barca y antiguo socio del club, llegó a poner a prueba las medidas de seguridad del Camp Nou y a introducir, tal y como sucede en la ficción, un objeto metálico en el interior de un dulce.
Calvet explica que en los campos de fútbol la seguridad es baja, “si fuera alta sería imposible que todo el público pudiera llegar a los asientos en tan corto tiempo”, y detalla que la vestimenta de los aficionados es la que marca la intensidad de la seguridad. “Si entras con traje y corbata nadie ve nada”.
En la ficción, el protagonista utiliza el mismo recurso y también consigue introducir al Camp Nou el arma con la que arremete en contra de los jugadores merengues.
Además, Calvet subraya que, en un clásico, la seguridad aumenta «muy poco respecto a cualquier otro partido» y considera un campo de fútbol como un posible objetivo de un ataque terrorista.
En la novela, Pol Sahan es originario de Tailandia, país donde el yihadismo tiene una fuerte presencia, aunque pasa desapercibido en Europa, aquí se desarrolla parte de la trama.
Barcelona, Girona y Banyoles son otros escenarios de la novela «porque cada uno tira de sus referentes», según indica el escritor, quien detalla que la obra se traducirá «seguramente» al castellano -actualmente se ha publicado solo en catalán- gracias a su actual ritmo de ventas.
«La espada de Alá» es la primera pieza de una trilogía en cuya segunda parte trabaja actualmente Calvet y para cuya ambientación viajó recientemente a Hong Kong.
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